RAMÓN MUNTANER (VIVIOGRAFÍA)

Ramón Muntaner nació en Cornellà de Llobregat (Barcelona) en 1950. Tras varios años de colaboración con diversos grupos de teatro independiente, en 1972 tomó la decisión de empezar a cantar en solitario, decisión que le llevó a presentarse al concurso II Promoció de Noves Veus, celebrado en la mítica Cova del Drac, de Barcelona, en el que obtuvo el primer premio.

EN 1974 actuó como telonero de Lluís Llach y ese mismo año Edigsa le publicó un primer single con dos canciones: "Decapitacions XII" –sobre un texto de Pere Quart– y "No convé que diguen el nom" –sobre un texto de Salvador Espriu–. Disco grabado con arreglos de Llach y Quico Pi de la Serra, que además participaron tocando el piano y la guitarra.

A partir de ahí, Ramón Muntaner inició una trayectoria profesional de gran fertilidad artística, sobre todo musicalizando, con indiscutible acierto y sensibilidad, la palabra de grandes poetas catalanes y haciéndose voz cantada de sus demandas sociales, de sus sueños de libertad y de sus sentimientos.

En ese sentido, la aparición de su primer disco titulao "Cançó de carrer" (Edigsa, 1975), supuso, para los seguidores y para los amantes de la "nova cançó", un acontecimiento impactante. Jamás nadie hasta aquel momento había musicalizado y cantado con tanta calidad, con tanta fidelidad al espíritu de los textos, y con tanta fuerza expresiva a poetas como Salvat-Papasseit, Pere Quart, Miquel de Palol, Felix Cucurull, Pañau i Fabra o Miquel Desclor.

Fotografía de COLITA

De aquel disco resulta especialmente inolvidable la canción que lo cierra, canción creada por el propio Ramón a partir de un breve poema de Felix Cucurull titulado "Amb la boca tancada":

«Sense veu, closos els llavis / encertàvem els crits dins l'espinada, / parlàvem per les puntes dels cabells eriçats / i amb el nostre tremolós, silenciós, / malgrat tot, / malgrat tot avançàvem...» 

«Sin voz, cerrados los labios / nos buscábamos los gritos en el espinazo, / hablábamos por las puntas de los dedos erizados / y con nuestro temblor silencioso / a pesar de todo, avanzábamos.».

Al año siguiente, publicó su segundo LP titulado "Presagi" dedicado íntegramente a la poesía de Miquel Martí i Pol. Bellísimo disco, primero monográfico dedicado al poeta catalán del que me gustaría destacar la canción "No demano gran cosa" ("No pido gran cosa")

Enamorado de esta canción, Kiko Veneno la adaptó y la cantó en castellano en su disco "Veneno" publicado en 1977; canción que tituló "No pido mucho".

En 1997, editado por Movieplay, Ramón grabó "Cróniques", disco de intenso contenido político en el que Ramón incluye, por ejemplo, el poema cantado de Paul Éluard "Escric el nom" –hermoso canto a la libertad traducido al catalán por Pere Quart–; "L'aventura", de Rimbaud, y "Senyor president" sobre un poema de Joan OIlé dedicado al presidente Suárez con motivo del referéndum sobre la Ley de La Reforma Política, cuya difusión radiofónica fue prohibida.

Tras todo el recorrido poético y musical desarrollado por Ramón Muntaner en sus tres primeros discos, en 1978 nos ofreció la que podríamos considerar su mejor obra, y una de las más bellas e interesantes de la música catalana de los años setenta. Me refiero a "Veus de lluna i celobert". Obra del poeta Joan Ollé a la que Ramónle puso música y en la que se plasma la memoria sentimental de la experiencia infantil y adolescente que a muchos españoles y españolas nos tocó vivir en la década de los cincuenta.

En "Veus de lluna i celobert", Ramón puso de manifiesto con evidente claridad, lo que fueron sus grandes cualidades artísticas: su sensibilidad musical, la fuerza dramática que sabía imprimirle a sus canciones, y la calidad de su voz desgarrada y subversiva cuando era necesario, y, a la vez, tierna cuando buceaba en las entrañas de los sentimientos más profundamente humanos; cualidades que, unidas a los brillantes arreglos musicales de Manuel Camps y al extraordinario conjunto de músicos de que solía rodearse en sus grabaciones y en sus conciertos, le convirtieron en un cantante de gran popularidad.

Además de sus discos de canciones, a los que habría que añadir "Balades y cançons" (1979) y "El pas del temps..." (1982), hay que destacar también su actividad como compositor musical de bandas sonoras de películas como "La Plaça del Diamant" (1982) basada en la novela de Mercè Rodoreda.

A partir de 1982, Ramón Muntaner, sin abandonar su pasión por la música y sin dejar de componer, dejó prácticamente de cantar. En 1988, nos sorprendió con un nuevo disco al que tituló "Fugida" en el que musicaliza e interpreta temas del escritor Vicenç Villatoro. Posteriormente centró principalmente su actividad en la difusión y el apoyo a la música y a la canción catalanas como director de la Sociedad General de Autores de Cataluña.

RAMÓN MUNTANER, QUINTÍN
CABRERA, FERNANDO G. LUCINI
y MARINA ROSEEL
en la SGAE de Barcelonaa.

El 10 de febrero de 2018 se le rindió un homenaje a Ramón Muntaner con un concierto de sus compañeros músicos en el Festival Barnasants; concierto celebrado en el Teatro Juventud de Hospitalet que fue grabado y publicado al año siguiente en un precoiso CD titulado "Cançó de carrer".

En aquel concierto homenaje intervinieron cantando canciones de Ramón: Silvia Comes, Coses, Enric Hernàez, Eduard Iniesta, Joan Isaac, Roger Mas, Borja Peñalva, Rusó Sala, Gemma Humet, Joan Manuel Serrat y Túrner & Sesé.

Lamentablemente, poco tiempo después, el 9 de diciembre de 2021, Ramón falleció.